Fotografía: Mariana Luna

El cineasta Damien Chazelle (director de Whiplash y La la land) no tenía ninguna intención de realizar una película sobre la vida del astronauta Neil Armstrong, hasta que supo que Neil y su esposa Janet perdieron una hija antes de que él fuera famoso. En conferencia de prensa realizada en el marco del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), nos cuenta sobre la realización del largometraje que ha sido el centro de la inauguración del Festival. First Man, es protagonizada por Ryan Gosling y Claire Foy y tendrá su estreno en salas mexicanas el 29 de octubre.

“No conocía mucho de Neil, y cuando llegó a mis manos el guion de Josh Singer (Spotlight), comencé a ver documentales, a investigar más sobre la vida de este personaje, y lo que despertó mi deseo por contar su historia fue la pérdida de su hija, cómo la sobrellevó, pensé en ese hombre caminando en la Luna como un hombre en duelo, fue entonces que se agregó una capa existencial, metafísica y espiritual en la que no había pensado antes”, aseguró Damien Chazelle.

Es así como Chazelle decidió abordar la historia del astronauta desde una perspectiva distinta, como la historia de un hombre que tiene que lidiar con una pérdida, esto es para él la verdadera esencia de su más reciente filme First Man (El primer hombre en la Luna).

Fotografía: Alejandro Meléndez

Chazelle y el guionista Josh Singer realizaron una exhaustiva investigación sobre la vida de Armstrong, pues aunque la historia de la película está basada en el libro First Man: The Life of Neil A. Armstrong, de James R. Hansen, dicho libro se escribió 10 años antes, así que además de adentrarse en la historia del astronauta, del ícono, también tuvo que conocer al hombre, “un hombre con un gran desapego emocional, tuve que acercarme a su familia, a sus colegas y a sus amigos, porque lo que buscamos fue hacer un retrato radical de un ídolo”. Menciona el director.

Por su parte, Josh Singer relata: “Siempre he sido curioso y algo que me gusta del cine es poder entrar a fondo en un mundo determinado, lo hice en Spoilight, aunque en First Man me sentí un poco nervioso porque no estoy relacionado con la ingeniería. Este trabajo fue muy desafiante, implicó entre otras cosas, entender la física y cómo funcionan las naves, eso por el lado técnico, pero también estaba el lado humano de Neil, un hombre que ocultaba sus emociones”.

“Buscamos entender a Neil y a su esposa como seres humanos, esa fue para nosotros la manera más eficaz de rendirles tributo”, expresa Chazelle, para quien First Man fue un gran desafío, no sólo por alejarse de lo que había hecho antes, sino por la responsabilidad de retratar la vida de los protagonistas, además de internarse en otra manera de hacer cine: el documental.