Jimena Montemayor en FICG38

El tercer largometraje de la directora mexicana compitió por el Premio Mezcal en el 38 Festival Internacional de Cine en Guadalajara. Se llevó el premio a Mejor Fotografía en un Largometraje Mexicano. La cinefotografía estuvo a cargo de Santiago Sánchez.

Tras haberse exhibido de manera exitosa en la más reciente edición de Les Rencontres Du Cinéma Latino Américain De Bordaux en Francia, durante el pasado mes de Marzo, Mujeres del alba, el tercer largometraje dirigido por la cineasta mexicana Jimena Montemayor Loyo, llegó a México para proyectarse como parte de la Selección Oficial en Competencia del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), mismo que se realizó del 3 al 9 de Junio del presente año.

Sinopsis: Esta película aborda lo sucedido tras el asalto al cuartel de Ciudad Madera en la Sierra de Chihuahua en 1965, cuando cansados de los abusos y despojos de las compañías madereras y ganaderas en complicidad con las autoridades, un grupo de maestros, estudiantes y líderes campesinos se rebelaron para tomar las armas. Ese 23 de septiembre comenzó la que es considerada la primera acción de la guerrilla contemporánea mexicana. Quienes se rebelaron se vieron obligados a ocultarse mientras que sus familias se convirtieron en el principal objetivo del ejército. Esta historia coral es contada desde la perspectiva de las mujeres valientes que mantienen la cotidianidad de sus vidas mientras luchan desde sus propios frentes para ayudar a la causa.

Crítica: Mujeres del alba refleja de manera extraordinaria el papel de las mujeres durante el asalto al cuartel, y aunque se centra solo en algunas de ellas, es suficiente para comprender que, una vez más, en todo acontecimiento y lucha histórica las mujeres tienen un peso tan fuerte como muchas veces olvidado o francamente marginado. Jimena le imprime un carácter tan sensible como contundente, y con pocos elementos logra reflejar el «detrás de» de un hecho que sería clave e inspiración de los movimiento guerrilleros posteriores.

Fotograma de la película

La película, basada en las novelas “Las mujeres del alba” y Las armas del alba”, del célebre escritor Carlos Montemayor, aspira a quedarse este año con el Premio Mezcal, galardón con el que se reconocerá a lo mejor del cine mexicano durante la edición número 38 del FICG, uno de los festivales de cine más importantes en México.

Mujeres del alba se proyectará el Miércoles 7 de Junio a las 15:50 hrs en la Sala Guillermo del Toro de la Cineteca FICG, el Jueves 8 de Junio a las 18:00 hrs en Cineforo y el Viernes 9 de Junio a las 10:30 hrs en la Sala Guillermo del Toro de la Cineteca FICG. Durante el festival estarán presentes la directora Jimena Montemayor, el productor Víctor Léycegui, el productor ejecutivo Pablo Zimbrón y las actrices Myriam Bravo, Chantall Frías, Shaula Ponce, Valeria Torres, Catalina López, Yadira Pérez, Yolanda Abbud, Yoshira Escárreg y Berenice Mastretta.

Con un guión escrito también por Jimena Montemayor, esta es una producción de Víctor Léycegui con Varios Lobos, junto a Conejo Media.

SOBRE LA CINEASTA JIMENA MONTEMAYOR

Egresada cum laude en la especialidad de Dirección y Cinematografía en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), México. Erasmus y FAMU International en la Film and TV School of the Academy of Performing Arts, República Checa, 2006-2007. Participó en el Festival de Cine de Locarno, Suiza, con su ópera prima, En la sangre (2014). Con su segundo largometraje, Restos de viento (2017), ganó el FIPRESCI a Mejor Película, el Premio Mezcal a Mejor Directora y el Premio Mayahuel a Mejor Película en el FICG, entre otros importantes reconocimientos.

La entrevista

Cuéntanos sobre la necesidad de seguir reivindicando el papel de las mujeres en las luchas y acontecimientos históricos que tan extraordinariamente reflejas en tu película.

Jimena: Sí, mira, pienso que esto de que las mujeres no han estado presentes en las luchas, los movimientos de cambio y en particular de la guerrilla, es algo que se da por sentado y por lo tanto se cree que sólo hay una sola forma de luchar o que la manera importante de luchar es con las armas y se olvida que no solo hay esa manera; que para que estos hombres puedan luchar, existe un grupo de mujeres que están conteniendo toda una aldea, pueblo o comunidad. Porque si los hombres se van de esa comunidad, la comunidad sigue, pero si las mujeres se van, la comunidad muere. Las comunidades que están cuidadas por matriarcados, siguen existiendo, porque las mujeres entienden y son con la naturaleza de otras muchas maneras, por ejemplo, las mujeres no ven un árbol sólo como una cosa material, sino que ven que sus hojas sirven para algo, que da sombra, energía, una serie de cosas y esto a veces pareciera que no tiene importancia, que solo existe, pero en realidad es porque las mujeres están resistiendo desde otras formas, entonces, para mi, es reivindicar esa otra manera de existir.

Y dentro de esta reivindicación, los niños, niñas y adolescentes están mucho más invisibilizados. Háblanos más sobre ello.

Jimena: Pues hablando desde lo autoral, a mi me gusta mucho trabajar con las infancias, es algo que me da mucha luz, contar las historias desde ahí, con personajes que conserven esta pureza, que conforme creces, se va perdiendo, pero más allá de que me guste trabajar con las infancias, a estas mujeres que yo conocí, son estas niñas de la historia, mujeres increíbles, valientes, que se escabullían, que siguieron y que mantuvieron su propia lucha. De alguna manera estas niñas, iban a ser las semillas, que ni los guerrilleros se imaginaron que serían el resultado de otras muchas luchas. Y para mi, todo me resulta muy esperanzador, porque fue un evento que sin duda marcó muchos otros, con niñas de las que no se esperaba nada o no se les daba la oportunidad y resulta que tuvieron incidencia relevante, tiempo después.

La recuperación o el salvaguardar la memoria histórica, a través de buenos trabajos cinematográficos como «Las mujeres del alba», ¿confías en que las generaciones actuales de cineastas (y las futuras) las sigan cultivando?

Jimena: Yo creo que sí y confío que así suceda. Es algo que se necesita, cuestionar desde ahí, tomar postura sobre ciertas cosas o temas, y de forma muy particular, para mi, creo que es una forma de luchar, de hacer mi parte, entonces yo tengo una idea muy esperanzadora al respecto de que se siga haciendo cine que salvaguarde la memoria histórica.

Sabemos que la película está basada en la novela de tu padre Carlos Montemayor, imaginamos que es un homenaje a su memoria, pero ¿Cómo fue el reto de tal adapatación?

Jimena: Sí, fue linda pero también complicada, porque yo hice mi investigación y tuve acceso a las grabaciones de estas mujeres, después yo también entrevisté a estas mujeres. Y por un lado está la realidad, y la novela por el otro, que si bien, la novela también está basada en hechos reales, también hay una adaptación, un proceso creativo de mi padre, pero faltaba entonces el mio y fue comenzar a ver detalles, mi propia visión, toda la información que ya existía, determinar lo que funcionaría en mi narrativa, que no era lo mismo que en la narrativa de mi padre, entonces lo más difícil fue eso, encontrarle la voz a la película.

Rueda de prensa del largometraje «Mujeres del alba», de Jimena Montemayor en FICG38. Foto: Lucía Ges
Rueda de prensa del largometraje «Mujeres del alba», de Jimena Montemayor en FICG38. Foto: Lucía Ges

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