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The Substance (La sustancia) llegará a salas mexicanas este 19 de septiembre, así que si estás buscando una película que no solo te entretenga, sino que también te haga reflexionar sobre temas profundos, The Substance (La sustancia) es una opción que no debes pasar por alto. Esta película ofrece una experiencia cinematográfica multifacética, capaz de entretener, incomodar, perturbar y sorprender a sus espectadores, incluso haciéndolos reír, mientras explora temas contemporáneos y relevantes.
Sinopsis: Demi Moore interpreta a Elisabeth Sparkle, una ex estrella de primera categoría pasada de moda y despedida repentinamente de su programa de televisión de fitness por el repugnante jefe de estudio Harvey (Dennis Quaid). Luego, se siente atraída por la oportunidad presentada por una misteriosa nueva droga: LA SUSTANCIA. Todo lo que se necesita es una inyección y renace, temporalmente, como la hermosa Sue de veintitantos años (Margaret Qualley). ¿La única regla? El tiempo debe dividirse: exactamente una semana en un cuerpo, luego una semana en el otro. Sin excepciones. Un equilibrio perfecto. ¿Qué podría salir mal?
Uno de los aspectos más destacables de The Substance es la elección de Demi Moore como actriz principal, quien ofrece la mejor actuación de su carrera como Elisabeth Sparkle. Moore, quien en la década de los 90 se convirtió en un ícono sexual tras su papel en «Striptease» (1996), aporta una profundidad impresionante a su personaje. En aquel entonces, Moore cobró alrededor de 12 millones de dólares por su participación, marcando un hito en la hipermediatización del cuerpo femenino. Su presencia en la pantalla no solo está cargada de nostalgia, sino que también resuena con una crítica social más amplia sobre la sexualización y el paso del tiempo.
La película toca un tema delicado y relevante: la sobreexplotación del cuerpo femenino y el impacto psicológico de la percepción social sobre la belleza y la juventud. En un contexto en el que plataformas como Instagram, TikTok y OnlyFans perpetúan la idealización del cuerpo joven y atractivo, The Substance examina las consecuencias de esta presión. Moore, a través de su interpretación, encarna de manera magistral el mensaje entrelíneas de la película, reflejando la angustia y la lucha interna de aquellos que han sido sexualizados y luego desplazados por una cultura obsesionada con la juventud.
Complementando a Moore en esta exploración de la juventud y la belleza está Margaret Qualley, quien encarna la parte joven del pasado glorioso de Demi Moore. Qualley, con su apariencia juvenil, hermosa, y su mirada y sonrisa inocentes, representa el ideal de belleza que la cultura actual sobreexplota. En la película, el cuerpo de Qualley es mostrado y explotado de manera deliberada, un contraste poderoso con el envejecido y desplazado personaje de Moore. Esta representación subraya la tensión entre la juventud y la decadencia, y ofrece una crítica mordaz sobre cómo los cuerpos jóvenes son consumidos por la cultura mediática, solo para ser reemplazados cuando ya no cumplen con las expectativas sociales.
Un elemento destacable de la película es su impresionante uso del color y del sonido. La cinematografía emplea una paleta de colores audaz y evocadora que no solo acentúa el ambiente, sino que también intensifica la experiencia emocional del espectador. Cada escena está impregnada de un colorido que, a veces, resulta casi abrumador, reflejando la agitación interna y el conflicto del personaje principal. El sonido, por otro lado, juega un papel crucial en la creación de una atmósfera de incomodidad constante. La banda sonora, a menudo estridente y desesperante, contribuye a mantener al espectador en un estado de tensión durante las dos horas y veinte minutos de película. Esta elección sonora es eficaz para amplificar la angustia y el malestar, haciendo que la experiencia sea intensamente inmersiva y, a veces, casi opresiva.
A medida que la trama avanza, The Substance no solo ofrece una experiencia emocional variada, desde la tensión hasta la comedia, sino que también invita a una profunda reflexión sobre la fugacidad de la fama y la imagen. La película explora cómo el paso del tiempo puede ser implacable y cómo las personas, especialmente las que han sido sexualizadas a través de su apariencia, enfrentan graves trastornos psicológicos y sociales al ver cómo su valor percibido disminuye.
La dirección de arte y la cinematografía de refuerzan este análisis cultural, creando una atmósfera que refleja las tensiones internas del personaje principal y subraya el impacto de la sociedad en la autoimagen y el bienestar psicológico. La habilidad del guion para alternar entre el suspense y la comedia también sirve para destacar estos temas de manera más accesible y envolvente.
Aunque algunos espectadores pueden encontrar la alternancia de tonos un tanto desafiante, este enfoque contribuye a la complejidad de la película y a su capacidad para provocar una reflexión planteada sin hacer concesiones. The Substance no solo entretiene, sino que también proporciona una mirada crítica sobre la influencia de la imagen y la percepción social en la vida de quienes han sido objeto de la mirada pública.
The Substance es una película que se atreve a explorar los límites del gore y el body horror con una perspectiva visceral y creativa. Con una interpretación conmovedora de Demi Moore, una narrativa que desafía las expectativas, un uso impactante del color y del sonido, y una apuesta arriesgada en su enfoque del género, esta película se erige como una obra significativa que invita a la reflexión sobre la cultura contemporánea y sus efectos en la psique humana.
TRAILER
FICHA TÉCNICA
Título: The Substance
Año: 2024
Duración: 140 min.
País: Reino Unido
Dirección: Coralie Fargeat
Guion: Coralie Fargeat
Cast: Demi Moore, Margaret Qualley, Dennis Quaid
