Foto: TOM BJÖRKLUND

Lola la mujer que vivió hace 6.000 años en una isla remota de lo que hoy es Dinamarca y ahora podemos saber cómo era. Tenía piel oscura, cabello castaño oscuro y ojos azules. Nadie sabe cómo se llamó o a qué se dedicaba, pero los científicos que reconstruyeron su rostro le han dado un nombre: Lola, relata BBC News.

Su fisonomía pudo conocerse gracias a rastros de ADN que dejó en una «goma de mascar», un pedazo de brea que se llevó a la boca hace miles de años y que se conservó lo suficiente como para determinar su código genético.

Según la revista Nature Communications, donde se publicó este martes la investigación, se trata de la primera vez que se extrae un genoma humano antiguo completo de otro material que no sea un hueso.