Foto: Lucía Ges

Chicuarotes, la segunda cinta dirigida por Gael García Bernal, fue presentada en la Cineteca FICG de la Universidad de Guadalajara el pasado 21 de junio.

En la alfombra roja estuvieron los actores Benny Emmanuel, protagonista del film y ganador del premio a Mejor Actor en la pasada edición del Festival de Cine en Guadalajara (FICG), Leidi Gutiérrez y el propio Gael, acompañados de Estrella Araiza, directora general del FICG.

Gael presentó brevemente su largometraje y agradeció a su familia por estar presentes en la proyección.

Sinopsis

Chicuarotes relata la historia de Cagalera (Benny Emmanuel) y Moloteco (Gabriel Carbajal), dos adolescentes de San Gregorio Atlapulco, un poblado de Xochimilco, quienes tienen como único fin conseguir dinero para salir de su pueblo y de la realidad que viven. Se les ocurre una salida fácil que al final terminará por complicarse.

El guion está escrito por Augusto Mendoza. La producción corre por cuenta de La Corriente del Golfo y Cinematográfica Amaranto en coproducción con TAO (Televisa) y Pulse Films, y está producida por Marta Núñez Puerto, Gael García y Thomas Benski. Participal también los actores Daniel Giménez Cacho y Dolores Heredia.

La cinta fue estrenada en la edición que acaba de concluir en el Festival de Cannes, como parte de la Selección Oficial en la sección Fuera de Competencia – Funciones Especiales.

Benny Emmanuel. Foto Lucía Ges.
Leidi Gutiérrez y Benny Emmanuel. Foto: Lucía Ges.

Gael conversa sobre Chicuarotes con el público

La cinta concluyó entre aplausos de los asistentes a sala Guillermo del Toro. Aparecieron de nuevo Gael, Benny y Leidi para contestar a las preguntas del público.

Para Gael una película es un gran poema colectivo. Respecto a la trama explica que Chicuarotes es una fábula anfibia juvenil. Lo que es real es que aborda narrativas establecidas, como el hecho de que para los personajes es necesario salir de la realidad en la que viven y  la única salida que ven posible es la de hacer dinero fácil.

En la cinta somos testigos de la traición del personaje principal (Cagalera) respecto a la empatía con que nos involucra en la primera parte de la trama, crear dicha empatía fue el principal reto para Benny Emmanuel, nos comenta sobre su participación. Asistimos a la pérdida de la inocencia durante la adolescencia, continúa Gael, y que además adquiere tintes trágicos en las clases más bajas de nuestro país, sobre todo para los jóvenes, quienes sienten más la emergencia respecto al futuro y para quienes muchas veces la realidad no les es suficiente para sentir que “son”, expresa.

Respecto al lugar donde fue filmada la historia, relata que se trata de la comunidad de San Gregorio, en el lado no turístico de Xochimilco, un sitio poco conocido, por ello, en principio, me era una historia demasiado ajena, y justo por ello me llamó la atención, me atrajo el misterio de ese desconocimiento. Lo trágico de un lugar que podría ser uno de los más hermosos del mundo y termina por ser un espacio del que solo se quiere huir, nos explica Gael.

También responde sobre la relación que se generó con la comunidad. Detalla que realizar una película lleva años, años de pensarla, soñarla y después, como en este caso, de involucrarse con los lugareños, que en este caso fue uno de los cometidos principales, pues varios de los asistentes y actores son de San Gregorio. El propio Molotecto (co-protagonista) es originario de un pueblo vecino de San Gregorio. Trabajaron mediante talleres y la propia gente del pueblo estuvo siempre atenta y con excelente disposición durante la grabación. Incluso el sismo del 2017 hizo estragos en el pueblo, muchas personas perdieron todo y, pese a esto, los habitantes nunca desistieron en su apoyo a la filmación.

Tanto para Benny como para Leidi García, trabajar con Gael fue muy cómodo, pues al ser también actor la comunicación con ellos era muy fluida, una sola mirada podía dar a entender qué hacer a los actores. Para los dos fue también un gran honor y señalaron lo generoso y empático del protagonista de Amores Perros.

Gael contó que conoció el guion hace ya diez años, mientras tanto soñaba con la película, enamorado de la trama, y cuenta sobre lo difícil que es mantener el entusiasmo en proyectos que ven su materialización a través de tanto tiempo. Por ello, repite que una película es un poema entre colaboradores.

Hay que filmar poco, menciona a la par que sonríe, no es necesario filmar mucho, sin embargo, colectivamente sí hay que contar muchas historias para hacer que en nuestro país surgan otras narrativas, que ayuden a saldar una deuda tan antigua que lleva a muchos a pensar que la única justicia que pueden conseguir es a través de su propia mano, y esto es terrible. Pensar los estragos sociales que viven tantas familias y personas en México se pueden salvar con un solo acto es ridículo. Por ello, lo positivo es que nuestro país ofrece la oportunidad de narrar muchas historias, de experimentar con ellas. Allí esta lo esperanzador.

Por último, cuenta lo absurdo que fue tratar de explicar qué significa chicuarotes en el Festival de Shangai, donde hace poco fue presentado el film. Chicuarotes es el gentilicio de los habitantes de San Gregorio. Entre risas, Gael agradece a todos por haber asistido y nos invita a que invitemos a otros a ver la cinta que se llegará a las salas de cine el próximo 28 de junio.

Foto: Lucía Ges.