En días pasados platicamos con Diego González, director del proyecto audiovisual de videodanza Incertidumbre. Diego está a unos días de terminar su carrera de Producción Audiovisual en la Universidad de Artes Digitales.
Diego nos cuenta que el proyecto surge a raíz de lo que es la incertidumbre, el vivir con esta expectativa de qué es lo que va a pasar. Él se llegó a cuestionar muchas veces sobre qué estaba haciendo con su vida, cómo sería su futuro, qué quería hacer, “era un choque de ideas muy grande” nos dice; y es por eso que retoma este gran momento de duda para llevarlo a la práctica audiovisual, lo que se ha transformado en una gran satisfacción.
Es interesante observar cómo, en el caso de Diego, un momento de duda lo lleva a algo tangible y no se queda en plano de la reflexión individual. Él tradujo ese estado de ánimo por los que pasamos todos en un producto creativo.
¿Porque videodanza? Le preguntamos a Diego, y nos responde que surge de sus propias pasiones por la danza, y en general, por las artes escénicas que le han acompañado desde que comenzó a practicar estas formas de expresión. Así que lo decidió contar una sensación desde un plano metafórico. Conectar el arte escénico y el arte audiovisual, es su interés fundamental y motivo por el que decide desarrollar el proyecto.
Nos cuenta también que ha sido un proceso difícil, porque por más herramientas que la universidad le ha brindado, como director ha sido una tarea muy compleja, pues más allá de todos los conocimientos técnicos tuvo que experimentar en más de alguna ocasión, apostando por cosas nuevas o solucionar situaciones imprevistas, así como utilizar diversos herramientas o recursos que no le fueron dadas en las clases y en la técnica únicamente audiovisual.
En Incertidumbre, la apuesta más importante está en convertir a la danza una producción cinematográfica como tal –con todo lo que ello implica–, es decir, que la creación audiovisual sea más que un simple registro. Procurar vencer esta barrera, y que la danza y la cinematografía se hagan una sola, un producto único. El resultado habla de este proceso, del cual Diego y todo el equipo se sienten muy orgullosos.
El equipo está conformado por: Jazmín Valdivia, quien es la coreógrafa. Diego comenzó a trabajar la historia con ella. Jazmín desde la parte escénica y Diego desde la audiovisual, crean un producto de interés común, una historia trabajada entre ambos en donde luego incorporan el crew cinematográfico y los bailarines, el compositor, etc.
Diego nos habla de un equipo que comenzó a formarse con él y Jazmín pero al que finalmente se sumó un crew que no sólo ha dejado su talento en cuanto a cuestiones técnicas, sino que como creadores todos han aportado de manera fundamental para que todo se lleve a cabo: Carlos Buck, como director de foto, Fabiola Medina, productora, Rodrigo Mora diseñador de producción, Diego Navarro diseñador sonoro y productor musical y los bailarines Diego Alcalá, Heydi García, Marco Antonio y José Ángel Rochin, todos ellos estudiantes de la escuela profesional de danza de Mazatlán, así como el músico y compositor Ulises Tavera.
Incertidumbre está a punto de presentarse, y esto se suma a que el equipo termina la carrera y será el producto audiovisual que entregarán. Al respecto, Diego nos dice que su interés está en que no sólo se termine en tiempo y forma en el plano académico, sino que se trata de un producto audiovisual completamente profesional, el cual se presenta para sus fines escolares, sí, pero también buscan que lo trascienda y se proyecte en festivales para el siguiente año. De igual manera, lo conciben como una primera puerta que les abra oportunidad a otros proyectos.
El 14 de agosto, Incertidumbre se presentará en el Conjunto de Artes Escénicas, en la sala Guillermo del Toro. Acá les dejamos unos stills que nos compartió el equipo de incertidumbre.
*Fotografías: Carlos Buck.