Ripio - Tapa y contratapa 4ª edición soporte papel

Para la literatura

Más vale cortar por lo enfermo

-para la

            Literatura-

que por lo sano

Más vale resarcir con males

                                             o

                                                literatura

que con dinero

                        o bienes

y más vale quemarse en un juego asociativo

Más vale no valer

-para la

            Literatura-

que valer.

Yo soy en el medio

Por lo que autor

(la continuidad)

yo soy en el medio un conturbado

a primer amago de roce de la apabullante gozadora

Gravitando en algún roce sobre ti

lector y malentretenido

logro socializar la varita

mágica del hada.

A Charles Dickens

El don concedido (en “El Hechizado”) el don

      [esparcido y anulado el don

el espectro de Jacobo Marley asustando

      [departe sobre pesadísimas cadenas con

      [Ebenezer Scrooge asustado

transcurren los cuatro cuartos de hora de

      [Trotty Veck y sus campanas

Oliverio Twist reza en el cementerio

Tomás Vago el polemista desengañado por la

      [perfidia equina goteaba y Francisco

      [Buenchico en descansada jira goteaba

      [también

hidalgos y coroneles y princesas infantiles de

      [vacaciones

mientras el señor Pickwick paladea su coñac

      [con agua caliente

Mariana y Engracia (inmersas en la batalla de  

      [la vida) y los renunciamientos

el clérigo de la cortedad de palabras Jorge

      [Sílverman diseña no obstante palabras y

      [se explica en los nueve capítulos de su

      [novelita

maese Humphrey habla desde junto a su reloj

      [al amor de la chimenea

el Cosario y Cañamón rompen a bailar entre

      [cricrís y ollas ronroneantes

y al punto se edita y con dibujos y, asimismo

      [se lee lo hasta aquí asentado por este

      [corresponsal londinense de “El Balido de

      [Lloronchisme”.

Recobra

La página recobra

unanimidad en el asco

recobra

un invento divino:

la anguila lánguida

Alquila bordes a los satélites

recobra entrañas:

¿néctar o fuga?

Ante

Bien soñado

antediluviano

Bien venido

de los estragos del diluvio

Bien venido de diluvio

Bienvenido escritor

anteclásico.

Escritor, el de los escritos, dice

Vean cómo me explayo vean

cómo me equivoco

propago erratas y chochez

Preceptor, el de los preceptos, dice:

Introductor, el de los introductos, dice:

El título es de la avanzada

alucinógena

a veces

El título avanza

aun petrificado

Comuniones insistentes:

insistencias

procurándose en comunión

Los Testigos de Cervantes:

pedido de palabras

rendimiento de palabras

El escritor no viene solo

(lector apuntado por un arma de juego)

Los libros nos miran:

“La Fábula Papal”

“Dilemama”

“De Cómo Voy a Degollar a mis Hermanos

        [Contra mis Convicciones y la Ley”

El final me halla buscándolo:

careo, caca y cacareo

He visto así

he leído.

Se infiltran

Se infiltran en las pesadillas de tus personajes

unos que embadurnan con plumas fascistas

      [del Ku-Klux-Klan

y sellan con sus orgías crucificantes

el colapso

Así como antes esos personajes

se infiltraron

en tus pesadillas.

Polvito de rapé para dos

Una vela para la noche en ella

reclamo con la mirada salvaje

¿Perder la mente entre vistosas mañas?

(Para un volumen en prosa con aires de lubricidad.)

Espectadores de “Hernani” de Víctor Hugo

“¡Mueran las pelucas!”

Románticos silbidos desaprueban puñetazos

y proyectiles clasicistas en aquel debut

El cuerpo a cuerpo de los cuatrocientos

      [románticos

empecinados contraponiéndose a la

      [mediatización

de las armas de fuego empuñadas

y disparadas algunas desde lejos

por clasicistas, calvos y genoux

aun en las cuarenta y cuatro representaciones

       [subsiguientes

Solo, emboscado en su palco, reticente

se regodea Chateaubriand

“¿Respondes de tus hombres?”

increpa Gerard de Nerval, el emisario del autor

Balzac y Lassailly, en el primer piso del teatro

En la platea, con todo su carisma

desde su levita roja de siempre, Théophile Gautier:

“Por el cráneo donde bebió Byron en la abadía

      [de Newstead, respondo por ellos”

Berlioz, en el segundo piso.

Apuntes del dramaturgo

Juegos

de sociedades en comandita

por arteras acciones

y cuentos verdes

                           absurdos

y desciframiento de manos

pies, pezones

y actores que improvisan

delante de examinadores

y recitan lo advertible

en dos carteles:

“¿Qué es

no ser

de izquierda?”

                        y

“Tomate tu mate”

Varios hombres

con una mujer cada uno

alzada cada mujer

o en el regazo

como dormida o desvanecida

semejando bebas

y emitiendo las mujeres

a veces sonidos

y oyéndose el consejo

de uno de esos hombres:

“Aun desecha

aprovecha la brecha, Chela

y estás hecha”

Flashes donde los personajes

dialoguen como si

estuvieran leyendo

(controlando)

las pruebas de un libro

Escenas opcionales:

por ejemplo, con Elvira

la hermana mayor de Orlando

quien tuvo una hija: Nelly

aliándose con Margarita

la otra hermana mayor de Orlando

quien tuvo un hijo: Mario

en contra de Orlando

el hermano menor de Elvira y Margarita

quien también tuvo un hijo

Escenas de flagelación

verbal (entre prostitutos y clientas)

y diálogos con apuntadores

(uno para cada personaje)

donde en ocasiones

el apuntador no apunte sino

que dé la réplica directamente

y se trabe en discreta

discusión con los personajes

o con los otros apuntadores

Escena en la que una falsa

niña oriental extraiga

un ridículo papelito

y lea un largo

o conceptuoso discurso

o bien esta misiva:

“Cecilia:

Emergiendo, en un intento

gráfico por acceder

a algún tipo de sobrio

firuleteado (fóbico)

y simpático contacto

fugazmente amistoso

te acerco la impresión

provisoria de que

aunque sin explotar

habría en ciertas napas

de tu entramado constituyente

un uso atinado del humor

calificado “bueno”

y que en frase hecha

al menos en nuestra

maltratada latitud

se disposicionaría en la otra

posibilidad de ordenamiento:

“buen humor”

Cada cual con lo suyo sin explotar

revelar, denotar, te extiendo

un convencional, convencido

y sentido lazo de augurios

de lucidez en combinatoria

con el humor mentado

para esta década

que asoma y asola

Amiga invisible e indivisible

en afán restitutivo

enancada en la contundencia

del espejismo de la aferrabilidad

por la escritura”

Y allí la niña oriental

pronuncia su nombre: “Shushi”

A esta altura de la representación

tendría que irrumpir un periodista

que previo interrogar

anticipe el tenor:

“¿Puedo formularle una pregunta inopinada?”

o

“¿Puedo formularle una pregunta intrascendente?”

o

“¿Puedo formularle una pregunta escatológica?”

o

“¿Puedo formularle una pregunta comprometida con la realidad?”

Título de la obra: “Dulces Arbitrarios”

(mejor que “Pobres & Anónimos”)

o “La Pieza Que Falta”

(o que sobra).

Rolando Revagliatti