Allá
Yo siempre supe allá en el fondo
que alguien la tendría más grande
Toda una vida acallando ese presentimiento
aturdiéndome con éxitos, figuración
y altísimas calificaciones
mucho ruido pequeño
sin duda con talentos
e imprevisibilidad
Pero el genio era otro
otro el fenómeno, el anormal
y al portento no le interesaría la trascendencia
en cambio, yo
me consumiría en mi satiriasis
¡ufa!
en mis floripondios y maratonismo
demasiado mortal
huérfano, viudo
atenazado por el letargo exhaustivo
de la compasión y, sobre todo
con su fachada ecuánime cuando no insigne
por la maldad revisionista
Las sirenas aún me aseguran que soy el mejor
que antes de mí, patrañas y rutinas
estándares amables a lo sumo
que el imperioso mar es mío
y el viento
pero
lo reconocí al principio
fue al principio cuando lo reconocí:
allá
en el fondo.
Pase en sucio o indaga la daga
Para el más azul de los príncipes
la nieve más blanca
La salpicada de estrellas le ofrecía al cristiano
vagina gaucha:
quince para una escoba:
deshacerse las trenzas y deshacerse
de las enaguas
¿Por qué pues entonces desnudez por desnudez
me quedo de smoking bailando con la más fea?
Tautología con todo mi amorcito
y besos de salva:
confiar en el pasado mañana
o sucumbir ayer cobardemente
Sinceramente no entiendo:
¿agoniza la burla?
¿Qué se hace con este fastidio?
¿Qué se hace con este fastidio
con cara de bobo?
Uno como yo, con cara de bobo
en esta mañana
¿qué hace con este fastidio
con cara de bobo?
La adoración del bobo que vive en mi cara
fastidia a mi cara de bobo
cumpliendo una mañana más
ante tanto fastidio.
Oportunidad
Yo me conformaría con tener treinta y nueve años menos
darme otra oportunidad tan sólo otra oportunidad
para no pasar tan resquebrajadamente desapercibido
birlaron mi momento de gloria
no supe apresarlo
Mi madre me peinaba con Brancato
el micro me pasaba a buscar
repetí tercero, cuarto y quinto grados
Creyendo obedecer designios divinos
mortifiqué un tanto mi carne circunstancial
Una pérfida se casó conmigo
y logró ella fecundarse de mí
y producir hijos que también
desaprovecharían la oportunidad
de suicidarse en el jardín de infantes.
Artísticamente
Artísticamente Maxi Gálvez
en la cima del éxito, o bien
en la cumbre del estrellato
me regodeo rematando un tema propio
en el Gran Rex colmado
Sienes y patillas canosas
modelada mi espléndida cabellera
por el coiffeur requerido por la más veleidosa burguesía
con astutos retoques en mi nariz
los doce meses veraniego en los escenarios
y con los sacos rigurosamente remangados
¿Que por qué degollé al lumpencito
que me extorsionaba?
Que yo
Que yo, Fernando
el proxeneta de Yolanda me desintegre
por la decisión irrefrenable de mi guionista
o que mi yo se desintegre
en la irrefrenable continuidad de la historieta
a usted:
¿le da lo mismo?
Diecinueve
Me muero todo
me muero en serio
me muero para siempre
se muere todo de mí
se muere de mí lo que soy
y lo que hubiera podido ser
(pensé en mi juventud)
Por eso me tragué sólo diecinueve
pastillas y no las veinte del frasco
completo de Halopidol
Porque pensé.