Fotografìa: Leopoldo Smith Murillo

Música (Explanada de la Alhóndiga)

La nueva escena de la música oriental china fue el nombre para el programa que presentó la Orquesta China de Shanghái, dentro de los eventos del LXVI Festival Internacional Cervantino (FIC) y sin lugar a dudas fue uno de los eventos más concurridos y apreciados por los espectadores guanajuatenses y visitantes durante esta edición del festival.

Si la exuberancia de la propuesta artística hindú ya nos había deleitado la explosión de color, sonido y movimiento de la República Popular de China nos ha llevado literalmente a otra dimensión o a otro tiempo que nos recuerda que China es una cultura milenaria.

La presentación no sólo resultó en un evento artístico sino didáctico ya que sobre las pantallas del escenario se proyectaban indicaciones e información en torno a los diferentes instrumentos utilizados durante la presentación así como de los períodos en los que cada instrumento surgió; adicionalmente se daban a conocer detalles de la historia que cada composición narraba en su momento.

Durante los tres primeros capítulos la audiencia logramos disfrutar flautas, percusiones e instrumentos de cuerda de gran antigüedad, que se mezclaban en la interpretación con la ejecución de los bailarines que exhibieron coreografías de gran presteza técnica y belleza desbordante.

Fotografìa: Carlos Juica

Dos ejecuciones lograron la conexión con el público de manera rotunda: por una parte Espadas que eran representadas por instrumentos de cuerda ejecutados por un sexteto de jóvenes asiáticas y cuya intensidad y entrega fue ovacionada con entrega. Las Mariposas que trataban el tema de una dramática historia de amor y venganza también resultó del agrado del público que abarrotó nuevamente la explanada de Alhóndiga.

Para despedirse la Orquesta China ofreció un número dedicado especialmente para el público mexicano. Se trató ni más ni menos que de Tequila composición de The Champs agrupación estadunidense que inmortalizó dicho tema y que fue adaptado por los participantes chinos. Este fue un evento lleno de música, baile, color y fiesta.

Fotografía: Miguel Hernández