Por ser una novela que pone en alto nivel la novela breve, en donde conviven la poesía y sus significados; por apelar a lo profundo, al poder de la evocación en la literatura; por ser magnífica, difícil, plena de emoción y significaciones, de deslizamientos por las pendientes de la cordura y la locura literarias; por estar partida en dos y reconstruida con los pespuntes de la escritura, Daniela Tarazona fue galardonada con el Premio Sor Juana Inés de la Cruz 2022 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, por su novela Isla partida, y los argumentos arriba citados fueron las razones con las que el jurado sustentó su decisión en el acta leída por la académica Sara Poot Herrera.
El libro de Daniela Tarazona fue seleccionado entre 107 obras de escritoras de habla hispana, y fue elegido por unanimidad por el jurado integrado por Poot Herrera; la narradora chilena Andrea Jeftanovic y el escritor venezolano Daniel Centeno Maldonado. El Premio está dotado de diez mil dólares en efectivo.
“Dueña de una voz narrativa enigmática que excava profundo en capas y sedimentos, una escritura de la extrañeza y de la interrogación, una extrañeza que a veces toma formas fantásticas o absurdas, quizás podríamos decir que se trata de una prosa subterránea que nos invita a conocer el magma con un despliegue de imágenes visuales cautivantes”, describió Jeftanovic durante la lectura de su semblanza.
“Cuando me avisaron que sería la ganadora de este Premio, el primero en mi vida, estaba dentro de un edificio antiguo en Madrid, en el barrio de Chueca; bajé las escaleras alrededor de la herrería que resguardaba el camino vertical del elevador y me quedé en la entrada del otro lado de la puerta que da a la calle. Tras recibir la noticia apenas podía hablar, gracias, muchísimas gracias, debo haber dicho unas siete veces”, relató Tarazona durante su discurso.
“Isla partida es un testimonio y una ficción, no soy una escritora ejemplar, no estoy interesada en dar lecciones de conducta a través de mis libros. En cualquier caso, me he empeñado en desobedecer en la medida de mis posibilidades, ¿por qué la literatura tendría que suscribir el buen comportamiento y lo que se impone como el sano juicio?”, expuso la autora al hablar de su obra.
Marisol Schulz, directora de la FIL, recordó que el Premio se instauró en 1993, y que entre las escritoras que lo han ganado se encuentran Elena Garro, Laura Restrepo, Margo Glantz y Gioconda Belli.
“Vivimos en una época extraña, la tecnología provoca que nuestras emociones sean etiquetadas como mercancía, y ocurre lo mismo con la literatura. Si puedo decir algo como esto y resulta escuchado por ustedes, lo haré, entonces digo, tenemos que revelarlos contra esas etiquetas reguladoras de nuestros comportamientos. Lo que sentimos tiene que escapar de las pantallas, tiene que irse de allí, darse a la fuga para desconocer las normas que establecen, por ejemplo, los hashtags, porque los trending topics son mensajes de la poca elipsis contemporánea. La humanidad está en otro sitio”, prosiguió Tarazona.
“Estas ideas también reverberan en el ánimo de la protagonista multiplicada de Isla partida, ella siente la amenaza de un sistema que comercia con las emociones de las personas que manipula y nos arrebata la capacidad de elegir, de desear, y nos aleja de lo que somos para esterilizar nuestra vida interior”, concluyó.
Fotografías: Fernanda Velazquez. Obtenidas de UdG