La poesía vive en la lengua indígena como la palabra sagrada que fluye en la naturaleza. Así lo dijo la poeta ch´o l Juana Peñate Montejo al recibir el Premio de Literaturas Indígenas de América (PLIA) 2020, que se entrega en el marco de la FIL de Guadalajara 2020. “La poesía, dicen que no existe en nuestras lenguas. Como tal. Y yo les digo que sí existe. Tal vez no con ese nombre de poesía, tal vez con otra concepción. La poesía, en nuestras comunidades indígenas, es como la palabra sagrada, el canto sagrado, la palabra florida. Eso es para nosotros la poesía”, dijo Peñate Montejo.
La poeta leyó algunos versos y dijo que la poesía ha existido siempre en su lengua, aún en la oralidad, en las actividades cotidianas y en sus ritos sagrados. “Por ejemplo: ‘Bajo tus pies, tus manos, un ramo de flores, aquí están tus formas, aquí están tus flores, tus retoños’. Es un fragmento de un ritual ceremonial que da cuenta de la existencia dual, de lo espiritual y lo físico, con la Tierra y el universo. Lo humano y la naturaleza. La familia y la comunidad”, añadió.
Y remató: “Que sea la poesía nuestra herramienta para poder decir nuestra palabra. Nuestra verdad. Esta lengua es tuya, es de nosotros. No permitamos que se marchiten nuestras flores, nuestras hojas. Porque somos hechos de presencia y de palabra”. El Presidente del PLIA, maestro Gabriel Pacheco Salvador, señaló que se trata de uno de los galardones más prestigiosos de América que promueve obras literarias de todos los géneros, escritas en las lenguas de pueblos originarios, celebrando la diversidad lingüística y el aporte cultural como componentes sustanciales del legado histórico de nuestros pueblos.
“Este premio tiene un lugar importante en la Feria Internacional del Libro, un huésped que se queda en la memoria de los grandes escritores del mundo. El jurado, en la reunión del pasado 17 de septiembre, determinó entregar este premio a Juana Peñate Montejo, originaria del Ejido Emiliano Zapata, en Chiapas, México”, apuntó Pacheco Salvador. El Rector del Centro Universitario del Norte (CUNorte), maestro Uriel Nuño Gutiérrez, dijo que cerca de 97 por ciento de la población mundial habla 4 por ciento de las lenguas del mundo, mientras que casi 96 por ciento son habladas únicamente por 3 por ciento de las personas que habitamos este planeta.
Es decir, una apabullante mayoría de la heterogeneidad lingüística del mundo es custodiada por una cantidad significativamente pequeña de personas. En México más de 25 millones se autoadscriben como indígenas, más de 7 millones hablan una lengua indígena, pertenecientes a once familias lingüísticas, reunidas en 68 agrupaciones, de las que se desprenden 364 variantes. Por ello, todo esfuerzo para contribuir a su preservación y conocimiento, reconociéndolas como patrimonio de la humanidad a través de diversas manifestaciones literarias promueve el valor social y cultural de la expresión escrita, del pensamiento de los pueblos indígenas de toda América.
La Secretaria de Cultura de Jalisco, Giovanna Jaspersen García, declaró que estos premios nos llevan a comprender a la América Latina, su unión y sus coincidencias, pues en el continente tenemos más de 500 lenguas, lo que significa 500 formas de comprender la realidad. “Que regresemos a la poesía, a la belleza nos parece muy importante, para comprenderlo desde el género. El año pasado fue la primera vez que fue para una mujer, una mujer maya que narraba la violencia de género y las migraciones. Hoy lo comprendemos desde la poesía, la parte más bella, y nos damos cuenta de que nuestras mujeres de los pueblos originarios, con sus voces cada vez más fuertes, que narran y enuncian, al inicio eran pequeñas gotas en un mundo eminentemente masculino. Hoy estas gotas se han reunido en lluvia y han comenzado a bañarnos. Y hemos comprendido otra forma de relatarnos no sólo a través de la lengua, sino a través de las voces”, dijo.
Texto por Julio Ríos.
FUENTE: Boletín de prensa FIL