En la conferencia “Protocolos de seguridad para cineastas” participaron el cineasta Everardo González y Paula Salcedo, miembro de la asociación de periodistas Artículo 19, donde destacaron que ejercer la verdad es un peligro y no hay garantías.
Filmar documentales, en un país, donde el Estado no ofrece garantías a sus ciudadanos, es peligroso y vulnerable, por ello, los documentalistas deben aprender a crear redes que les den seguridad, y de esto se habló en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, edición 35.
“En mi caso, la ética y la confianza es la única forma de medio cobijar a mi equipo de trabajo”, comentó Everardo González, director de La libertad del diablo.
Dio el ejemplo de su documental, donde trabajó por 6 años para lograr filmar los testimonios de víctimas y victimarios de la corrupción y la violencia en México.
“Trabajé con organizaciones y periodistas que me parecen éticas, como Carlos Cruz, quien sabe las reglas del juego en Ecatepec. Debe existir quien dé calma al equipo y que sea una llave para llegar a quienes deseamos”, añadió Everardo González.
Dependiendo el terreno que se quiere pisar, explicó el cineasta, se debe ser consciente que hay reglas a respetar y jamás romper los vínculos de confianza.
Él decidió filmar a los personajes en una zona neutra para no llamar la atención.
“Somos arrogantes con las cámaras y debemos entender que no somos más relevantes que el lugar donde queremos filmar”, comentó el multipremiado cineasta.
Dejó en claro que, a pesar de ser precavido, de acercarse a expertos en el tema y extender redes, nada es infalible y eso es delicado.
“Creo que en México está en riesgo la libertad de expresión, no en la lógica de 1970, y lo único que puede blindar es el respaldo, nos vamos a necesitar los siguientes años”, añadió Everardo González.
Paula Salcedo explicó cómo trabaja Artículo 19, que es una red de periodistas que se ayudan antes y después de ser víctimas de alguna agresión.
“Es importante decir que el responsable de nuestra seguridad es el Estado, pero al no existir ese respaldo, creamos relaciones de confianza y apoyo, protocolos para poder actuar de manera más eficaz”, dijo Paula Salcedo.
Ella ve similares las carreras de periodismo y documentalista, ya que ambos van tras la verdad, deben manejar la ética y las redes de apoyo.
“Ante la corrupción y la impunidad, la sociedad civil debe organizarse. Estamos viviendo una censura, pero no de la manera tradicional, por eso son importantes las redes de apoyo”, explicó Paula Salcedo.
Everardo González aseguró que la nueva generación de documentalistas y periodistas está cercana al activismo que los vuelve militantes de la verdad.
“Filmar la realidad ya es un riesgo ¿Para qué arriesgarse, cuando dependes del mercado que es caprichoso y la vulnerabilidad del equipo se puede ir a la basura?”, dijo Everardo González cuando una estudiante le pidió un consejo para quienes desean dedicarse al documental.
Trailer de La libertad del diablo.